Entrar
en el mundo erótico de Shunga es
viajar al pasado. Traducido literalmente, Shunga significa ‘imagen
de primavera’, una manera delicada de decir ‘relaciones sexuales’
entre personas.
Esta
palabra se usaba para designar las pinturas eróticas japonesas del
siglo XVI, XVII y XVIII, un tipo llamado ukiyo-e, que no eran otra
cosa que obras sobre madera o pergamino con escenas sensuales y
episodios de amor carnal, siempre elaborados con mucho cuidado y buen
gusto.
El
arte Shunga, aunque oculto durante siglos, marcó el principio de la
industria pornográfica para la clase media nipona y sirvió durante
generaciones como enseñanza para los hijos y las hijas de muchas
familias.
Estos
exclusivos productos de Shunga no sólo actúan como intermediarios
entre los amantes que quieran potenciar e incrementar su deseo
sexual, también son un auténtico regalo para la vista.
Con
una presentación muy cuidada y glamurosa, Shunga ha querido rescatar
la filosofía de las antiguas ukiyo-e (pinturas eróticas japonesas),
dando así a su colección un delicado toque oriental.
En
esta colección de cosmética íntima, Shunga apuesta por la
originalidad, el atractivo, la sensualidad cómplice y la calidad de
los productos, elaborados con las mejores materias primas.
Su gama de aceites de masaje de origen oriental, son de alta calidad,
compuestos por una mezcla se aceites esenciales como aceite de
almendras dulces, semillas de uva, sésamo, aguacate, esencia pura de
Ylang-Ylang y Yohime.
Fabricado
según la tradición milenaria oriental, con este aceite de una
dulzura absoluta, te deslizarás fantásticamente sobre el cuerpo de
tu amante produciendo una sensación indescriptible
Con
aromas muy sensuales, estimulan todos los sentidos, y logran que tu
piel permanezca suave durante largo tiempo sin dejar sensación
grasienta.
Convierte esa velada en algo que nunca olvidaréis!